jueves, 20 de diciembre de 2007

Los ejercicios durante el embarazo

Mantenerte en forma siempre es importante, especialmente durante el embarazo. El ejercicio moderado puede fortalecer los músculos que usarás en el parto, como los del abdomen, la pelvis y la parte baja de la espalda. Además, el ejercicio puede mejorar tu postura y aliviar molestias como tensión en la espalda y calambres en las piernas. Y el ejercicio prenatal te ayuda a prepararte para el parto al aumentar tu resistencia y vigor, consume calorías que puedes ingerir en exceso, oxigena más tu sangre y por consiguiente la del bebé y mejora considerablemente tu condición física, indispensable para llevar sin complicaciones las etapas finales del embarazo.
En general, si tu embarazo se desarrolla normalmente, puedes continuar practicando los mismos deportes o ejercicios que hacías antes de quedar embarazada. Sin embargo, tendrás que hacer ejercicios a un paso más lento a medida que tu embarazo progresa y de sentir algún dolor, náuseas, o mareo, deja de hacerlos inmediatamente. Esta es la manera en que tu cuerpo te pide que disminuyas el ejercicio. Si no has estado haciendo ejercicios regularmente, el embarazo es el momento ideal para comenzar un programa de ejercicios. Recuerda que todos los ejercicios deben ser supervisados por tu médico personal.


Los ejercicios están indicados para las FUTURAS MAMÁS desde el PRIMER MES hasta los ÚLTIMOS MESES DE EMBARAZO.
En TODOS LOS CASOS los EJERCICIOS TERAPÉUTICOS deberán ser AUTORIZADOS por el médico especialista.
Son ejercicios terapéuticos globales, realizados en grupos pequeños de 2 a 3 mamás, CONTROLADOS y SUPERVISADOS por un profesional de la salud.
De esta manera, se logra un trato PERSONALIZADO a las FUTURAS MAMÁS.


Objetivos de los ejercicios terapéuticos en las futuras mamás
Prevenir dolores por contracturas musculares, especialmente a nivel de la columna vertebral, ocasionados por los constantes cambios que se producen a lo largo de los nueve meses de gestación.
Prevenir dolores a nivel de las articulaciones sacroilíacas por el aumento de los diámetros de la pelvis.
Mejorar la mecánica respiratoria, aumentando la capacidad ventilatoria y reforzando la actividad diafragmática, alterada por el aumento del volumen y presión abdominal.
Mejorar el gasto cardíaco, aportando mayor cantidad de oxígeno a nivel de los tejidos de la mamá y también del bebé.
Aliviar la fatiga y edemas que se producen en los miembros inferiores, estimulando el retorno venoso.
Mantener y mejorar la movilidad articular.
Reforzar el tono muscular global, mejorando la resistencia, coordinación y fuerza muscular general.
Reforzar el complejo diafragmático pélvico cuya función es el sostén de los órganos pélvicos contra la gravedad y la presión abdominal que van en aumento a lo largo de los nueve meses de embarazo.
Mejorar la función esfintérica del piso pelviano, ayudando en el control de las aberturas perineales, contribuyendo al mantenimiento de la continencia.


1 - Sentada con la espalda recta y las piernas dobladas, apoyando planta con planta, sostener los brazos a la altura de los hombros, levantar contrayendo, doblando codos y bajar a la altura de los hombros nuevamente, repetir 8 veces.


2 - Acostada boca arriba, levantar los brazos al mismo tiempo que contraes tus músculos abdominales y levantas tus piernas dobladas, este ejercicio también puedes hacerlo tomando con ambas manos tus músculos abdominales una vez contraídos, levantando las piernas dobladas, repetir de 6 a 8 veces.


3 - Sentada con la espalda recta, dobla y contrae los brazos y ciérralos al frente apoyándolos con fuerza, sube y baja los brazos, repite de 6 a 8 veces.


4 - Colócate en cuclillas, manteniendo recta la espalda, de preferencia apoyando los talones en el piso, sin dejar que los pies roten demasiado hacia afuera o adentro, empuja las rodillas con tus brazos para estirar los músculos de la parte inferior del muslo.


5 - De pie con la espalda y piernas rectas y abdominales contraídos, contrae los perineales (músculos alrededor de la vagina) y contar de 1 a 8, bajar lo más que se pueda, abriendo más las piernas relajando los músculos perineales, contando de 8 a 1. Repetir de 4 a 6 veces.


6 - De pie con la espalda recta, piernas abiertas y brazos extendidos, bajar el brazo para tocar el pie del mismo lado que has girado hacia afuera, cambiar al otro lado y repetir cuatro veces de cada lado.


7 - a) Con el abdomen contraído, rodillas separadas, estira la espalda y la cabeza, llevando los brazos hacia adelante estirados. b) Deja caer el peso de los glúteos hacia atrás recargándolos entre los pies, estirando la espalda, descansar la cabeza y los brazos, mantener esa posición por unos segundos, repetir de 4 a 6 veces.


8 - Sentada con la espalda recta, junta las plantas de los pies, haciendo presión sobre las rodillas con las manos, para tratar de tocar la superficie del piso con ellas.


9 - Acostada con la espalda pegada al piso, y una pierna doblada, subir la otra cuando se inspira profundamente llevando el pie en arco, al bajar, contraer los músculos abdominales y expirar. Repetir 8 veces con cada pierna.


10 - Con las palmas y las rodillas apoyadas en el piso sin doblar los codos, extender la columna (como gato erizado), lo máximo posible hacia arriba, por unos segundos y volver a la posición original. Repetir 10 veces.


11 - De pie con las piernas separadas y la espalda recta, bajar abriendo las piernas, ponerse en puntas, bajar en puntas y asentar los pies en el suelo, repetir de 4 a 6 veces.


12 - Apretar firmemente palma contra palma, codos levantados, contraer los pectorales y aflojar; repetir de 8 a 12 veces. Tomar con las manos los antebrazos y levantar los codos a la altura de los hombros, hacer presión, para tensionar los músculos pectorales. Repetir de 12 a 16 veces.


Después de tener tu bebé, el ejercicio te ayuda a perder el peso extra que ganaste y a volver a ponerte en forma. Acude a consulta antes de comenzar un plan de ejercicios después del parto. El ejercicio regular después del parto ayuda a endurecer todos los músculos que se estiraron durante su embarazo, especialmente en el abdomen y la base de la pelvis.


leido en:bebesenlaweb.com.ar


Estoy embarazada ??

¿Te sientes deprimida, con nauseas, vómitos, mareos, fatiga, sientes tus senos más grandes y te lastiman, notas que la aureola de tus senos ha obscurecido, continuamente vas al baño a orinar, te sangran las encías?
¿Recuerdas cuando fue la fecha de tu última menstruación?
FELICIDADES AMIGA ! ... estás EMBARAZADA, que sorpresa verdad? estás iniciando una de las etapas más importantes de tu vida, una etapa llena de cambios, porque tu cuerpo se esta preparando para dar vida a un nuevo ser, tu bebé, ahora más que nunca debes de comer muy bien, y llevar algunos cuidados durante el embarazo.
Bueno si todavía tienes alguna duda, puedes hacer lo que muchas mujeres hacen, corren a la Farmacia más cercana a comprar un Método casero para Prueba de Embarazo, aunque estas pruebas no son tan precisas como las que se llevan a cabo en algún laboratorio o en el hospital.
Si vas a utilizar una prueba casera, antes de comprarla revisa la fecha de caducidad del equipo, sigue cuidadosamente las indicaciones, te recomiendo utilices la primera orina de la mañana para llevar a cabo la prueba. La duración de estas pruebas varia desde dos minutos hasta una hora.
Aunque es más recomendable que acudas a un Laboratorio o a un Centro de Salud a realizarte la prueba de embarazo, que puedes ser por medio de un análisis de sangre o de orina, para conocer con más exactitud la cantidad de hCG, que es la sustancia que evita la menstruación.
Si tu embarazo esta confirmado, deberás iniciar un tratamiento prenatal, y para ello debes de concertar tu primera visita al medico. Durante esta sesión el Doctor te hará un examen físico completo y un examen de tus senos y de tu vagina.Si no te has realizado últimamente la Prueba del Papanicolaou es probable que te la realicen. También el médico te preguntará sobre la fecha de tu última regla y calculará la fecha esperada de tu parto.

Probablemente el medico te pedirá que te realices un análisis de sangre para determinar: el grupo sanguíneo y factor RH, la vacuna contra la Rubéola, nivel de azúcar en la sangre, biometría hemática (en caso de síntomas de anemia), posibles enfermedades (anemia, talasemia, drepanocítica, hepatitis, SIDA, sífilis, gonorrea, clamida, etc.).
También requerirá de un análisis de orina para revisar las proteínas, azúcar, sangre y sales de tu cuerpo. No te asustes con todo esto y empieces a pensar que algo malo esta sucediendo, ya que todas estas pruebas son de rutina.
Si todo resulta bien es probable que tu próxima cita sea dentro de 4 semanas y así visitarás al médico cada 4 semanas hasta la semana 28 de gestación, ya que a partir de esta lo harás cada dos semanas durante 8 semanas y por último cada semana hasta que se inicie el parto.

leido en: bebesenlaweb.com.ar

martes, 18 de diciembre de 2007

Bronquiolitis, uno de cada seis bebés padecen esta enfermedad

Entre el 10 y el 15 por ciento de los niños españoles menores de un año padecieron bronquiolitis, enfermedad que ataca las terminales de los bronquios o bronquiolos, sostiene el Servicio Vasco de Salud, con sede en Bilbao.
Aunque esta cifra es porcentualmente considerable, el índice de mortalidad en los neonatos por bronquiolitis es bajo, respecto a otras enfermedades, como la neumonía y los males congénitos. Según la entidad estadística de salud mexicana -INEGI SSA/ DGEI- de cada 100 mil niños nacidos vivos, 20 mueren de este mal. Esta cifra corresponde al 1,23 por ciento de infantes que falllecen por esta causa. Si no es tratada a su debido tiempo y con los cuidados necesarios, la bronquiolitis puede desencadenar una neumonía o crup, enfermedades con mayores índices de mortalidad.
Según el Servicio Vasco, la bronquiolitis puede ser causada por varios tipos de virus entre los que se encuentran el Virus Respiratorio Sincital, el Virus Adenovirus, el Virus Parainfluenza, el Virus Rinovirus o el Virus Influenza.
En los países que presentan estaciones climáticas, se desarrolla con mas facilidad durante el invierno y, en los países tórridos, estos casos se presentan durante todo el año, con mas frecuencia en las ciudades más húmedas y en las que ocurren cambios de clima constantes como Barranquilla y Bogotá, en el caso colombiano.
Síntomas
La bronquiolitis es una infección en la vía aérea inferior (causada por los virus antes mencionados) que ataca generalmente a los lactantes y que reincide tiempo después de la primera recaída. Puede causar eventualmente una afección en las vías respiratorias del niño. Según la pediatra colombiana, María José Pedraza, la bronquiolitis empieza con todos los síntomas de la gripe o catarro de vía aérea superior, desencadenando a los pocos días (entre 2 y 5) los siguientes síntomas:

  • Gran dificultad respiratoria. Respiración corta y agitada, algunas veces produciendo un silbido parecido al que produce el asma
  • Tos constante
  • Fiebre baja durante los primeros días
  • Color pálido o azulado en la cara o algunas partes del cuerpo (piernas, pies, estómago)
  • Dificultad para conciliar el sueño
  • Dificultad para tomar el pecho o el biberón
  • Pausas respiratorias o apneas (más comunes en bebés prematuros)
Esta enfermedad, que afecta principalmente a los niños, puede transmitirse por las secreciones respiratorias, por contacto directo u objetos del hogar, especialmente en el primer año del bebé. La duración de la incubación varía de 2 a 8 días, dependiendo del virus que la cause. Posteriormente, la enfermedad puede durar tres días, en promedio, con algunos síntomas más largos, como la tos que puede perdura hasta por 3 semanas más.
Lo que los padres pueden esperar
Al primer síntoma de bronquiolitis, es necesario acudir inmediatamente a su médico o a una sala de urgencias para que se evalúe si es necesaria o no la hospitalización del niño. Una vez en la clínica, puede tratarse de la siguiente manera (el tratamiento dependerá del nivel o grado de la enfermedad y del médico que trate al niño):
  • Puede colocársele al niño un sensor en sus dedos un Oxímetro o Saturómetro para asegurarse de la oxigenación de la sangre.
  • Puede suministrársele oxígeno
  • Puede tomársele un Rx de Tórax si hay sospecha de neumonía
  • Puede practicársele un cultivo de virus en las secreciones nasales.
  • Puede iniciarse un tratamiento por medio intravenoso.
  • Puede iniciarse por vía inhaladora, el suministro de una medicación broncodilatadora, por medio de neobulizador o una aereo-cámara.
  • En algunos casos, el equipo médico decide utilizar corticoides, para tratar los casos más severos de bronquiolitis.
Según Pedraza, es importante que los padres pregunten constantemente por el tipo de tratamiento que se está siguiendo, pues algunos procedimientos (como los llevados a cabo por vía intravenosa o la terapia respiratoria) pueden causar dolor en los niños y, por tanto, alteraciones en los padres.
Recomendaciones para los padres
Independientemente del tratamiento médico, los padres del niño enfermo deben contribuir en dos de los procesos más difíciles: comer y dormir. Comer, puesto que su estado de agitación impide, en algunos casos, la toma de pecho o biberón. Según Bárbara de Zuleta, líder de la Liga de la Leche en Bogotá (Leche League), algunas madres que conocen los síntomas de la bronquiolitis descubren prontamente la anomalía en sus hijos, por la dificultad para recibir leche materna. Dormir también resulta un proceso complejo, en la medida en que los síntomas de congestión y dificultad para respirar se agravan -especialmente en la madrugada- impidiendo la conciliación del sueño o mantener el sueño profundo.
Las recomendaciones para la alimentación, sostiene Zuleta, están basadas en la modificación de los horarios. Debe reducirse el tiempo de cada toma, pero incrementar el número de comidas diarias. En los niños mayores de cinco meses, que usualmente no tienen a la leche como único alimento, este proceso -agrega Zuleta- se facilita, pues la misma posición de alimentación materna (acunados a la madre) los congestiona. En todo caso, afirma la experta, la leche materna por su variación de acuerdo a las necesidades del bebé, es una buena medicina para generar anticuerpos en los niños enfermos.
En el caso del sueño, si el paciente es bebé, puede resultar aconsejable -a menos que el médico indique otra cosa- que duerma con su madre ligeramente sentada, sosteniéndolo en el pecho. Si es un niño mayor de 6 meses, sostiene Pedraza, deberá dormir inclinado, recostado sobre almohadas.
Estas recomendaciones permiten que las vías respiratorias del niño estén -por más tiempo- libres de mucosidades.
Un porcentaje importante de los padres, siguiendo tradiciones familiares, suele utilizar humidificadores, con el fin de hacer más fácil la respiración. Pedraza sostiene que, por el contrario, su aporte a la solución de la bronquiolitis es ineficaz y, en algunos casos, contraproducente. De la misma manera, es importante evitar la medicación de jarabes o expectorantes, por parte de los padres de familia.
Prevención
Los virus que producen enfermedades en el tracto respiratorio no han podido ser atacados por vacunas. De esta forma, la única prevención a este mal corre por cuenta del cuidado que los padres deben tener sobre las rutinas de sus hijos. No exponer a los bebés a cambios bruscos de temperaturas o a corrientes de aire, puede ser un primer camino de ayuda. Los niños, especialmente en los primeros meses de vida, no deberán ser expuestos a grandes multitudes como centros religiosos, centros comerciales y supermercados. En el hogar, resulta importante, una revisión de un experto que evite las corrientes de aire y la humedad
Copyright Bibliomed

Tiene cura el autismo ?

Cuando un padre sospecha que su hijo puede padecer de autismo, porque ve que no se comunica bien con el entorno, porque no responde cuando se le habla, o no sonríe como los otros bebés, generalmente inicia una odisea en busca de un diagnóstico, al que no siempre se llega con facilidad. De hecho, no hay exámenes físicos que permitan saber si un niño padece de autismo. El médico comienza a averiguar acerca de la historia del desarrollo del niño, y realiza el diagnóstico sobre la base de las observaciones de su conducta, y de los resultados de exámenes que permitan evaluar sus habilidades lingüísticas, la coordinación motora, la audición y la visión.
Para descartar que el problema de conducta se deba a un desorden físico o fisiológico (como la epilepsia), se puede efectuar un electroencefalograma. También se realizan análisis de orina y de sangre para descartar problemas metabólicos. Generalmente se llega al diagnóstico luego de que el niño fue examinado por pediatras, psiquiatras, psicólogos, especialistas en educación y en habilidades del lenguaje.
Tratamientos a la medida de cada problema
No hay una terapia curativa para este desorden. Sin embargo, los chicos pueden tener una mejor calidad de vida con determinados tratamientos. Los especialistas señalan que uno de los conceptos erróneos que existen es que no se puede hacer nada por los niños que padecen autismo. En realidad, los autistas que poseen un desarrollo normal de la inteligencia tienen grandes posibilidades de socialización, cuando cuentan con el apoyo de la familia y son tratados por un equipo multidisciplinario de terapeutas, como psicólogos, psiquiatras, neurólogos, y fonoaudiólogos.
Con respecto a la educación, es posible desarrollar un programa de educación individualizada que apunte a los problemas específicos del niño. Esto incluye una terapia del lenguaje.
Los tratamientos apuntan a enseñarles a modificar conductas a través de la educación y del juego simbólico. Se busca desarrollar recursos alternativos de comunicación en los chicos. En algunos casos se utilizan medicamentos que tienden a mejorar los trastornos asociados, como las conductas obsesivo-compulsivas o de autoagresión. Pero, señalan los especialistas, lo principal es enseñar métodos comunicativos y lograr que las personas con autismo aprendan a organizar la conducta.
La doctora Catherine Berthélémy,Francia, señaló recientemente que los niños con autismo procesan la información proveniente del medio de manera diferente a los demás niños. Y, en este sentido, los especialistas desarrollan terapias mediante juegos simples, respetando el ritmo de cada niño. Según la especialista francesa, los resultados muestran que la habilitación temprana de las funciones psicofisiológicas básicas del niño contribuye a que él pueda comunicarse con los demás, y facilita el desarrollo psicológico.
En suma, los expertos coinciden en que es fundamental la estimulación temprana de los niños, y desarrollar una terapia a la medida de cada problema. De este modo, si bien el trastorno, por el momento, no tiene cura, es posible mejorar la calidad de vida de estos pacientes.
Copyright Bibliomed

¿Qué se sabe sobre el amamantamiento?

La lactancia materna es una instancia de movilización social que cobra mayor importancia cada año. Pero como existe tanto información confiable, probada científicamente, como otra, que raya en el mito y la mentira, a continuación algunos Verdaderos o falsos sobre la mejor forma de alimentar al bebé.
Dar el pecho ayuda a perder, en forma natural, los kilos de exceso acumulados durante el embarazo.
Cuanto más seguido se le da el pecho al bebé, más rápido se vacía la glándula mamaria y, en consecuencia, produce menos leche.
No es recomendable beber demasiada agua antes de amamantar, ya que puede producir leche aguada que no alimentará en forma suficiente al bebé.
Si un niño no aumenta bien de peso, es posible que la leche de su madre sea de baja calidad.
La alimentación con leche materna más allá de los seis meses tiene un valor más afectivo que nutricional.
Es mejor no darle demasiado tiempo de mamar de un solo pecho para evitar que se vacíe del todo.
Es bueno esperar a que se llenen totalmente los pechos para ofrecércelos al bebé.
Un bebé de dos meses requiere aproximadamente entre siete y ocho mamadas o tomas de leche materna, a los cuatro meses esta cantidad disminuye a seis tomas; y luego de esa edad sólo necesita entre cuatro y cinco.
Si un bebé muy pequeño permanece dormido por más de tres horas y no reclama alimento es bueno despertarlo.
Algunos niños pueden presentar alergia a la leche materna.
No es necesario utilizar siempre ambos pechos en cada toma o mamada.
Amamantar a un niño durante mucho tiempo puede causar obesidad cuande éste crezca.
Es importante que el niño se acostumbre desde recién nacido a tomar el pecho cada 3 horas y mantener esa frecuencia.
Posicionar al bebé “vientre con vientre” o “panza con panza” ayuda a evitar que tenga cólicos.
Es malo hacer dieta para adelgazar durante el período de lactancia.
Respuestas

  • Respuesta 1: VERDADERO La finalidad de la acumulación de grasas durantes el embarazo, es justamente la de conformar una reserva para la producción de leche cuando el niño nace. Por ello cuanto más amamante una mujer a su hijo más se consumirán esas reservas y no necesitará hacer luego ninguna otra dieta para recuperar su peso.

  • Respuesta 2: FALSO. La producción de leche aumenta cuanto más se la estimule, es decir que si una mujer coloca al bebé al pecho más seguido, éste succionará y estimulará la bajada de leche. Cuanto más frecuentemente se produzca este estímulo mayor cantidad de leche producirá la madre. La producción de la leche ha demostrado estar relacionada con la frecuencia de las tomas. La cantidad de leche empieza a disminuir cuando las tomas son poco frecuentes o restringidas.

  • Respuesta 3: FALSO. La leche materna está compuesta por agua como componente principal, por eso es muy importante que la madre se encuentre muy bien hidratada. La composición nutricional de la leche materna NO varía con la cantidad de agua que la madre bebe. Sin embargo, si no dispone de suficiente cantidad de líquido la producción de leche disminuye.

  • Respuesta 4: FALSO. No existe ninguna leche materna de baja calidad. Los estudios científicos demuestran que aun las mujeres desnutridas son capaces de producir leche de suficiente calidad para cubrir las necesidades de crecimiento del niño (salvo que la desnutrición fuera muy severa). En la mayoría de los casos, el escaso aumento de peso se debe al consumo insuficiente de leche materna o a un problema orgánico del niño. El consumo insuficiente puede deberse a un mal posicionamiento, falta de apoyo familiar, baja producción por falta de estímulo o baja ingesta de líquidos.

  • Respuesta 5: FALSO. A medida que el niño va creciendo y madurando, la composición de la leche materna cambia. Después de los seis meses de edad, los requerimientos específicos del bebé hacen que sea necesario incorporar alimentos complementarios adecuados. Sin embargo, la leche materna continúa siendo su fuente primordial e ideal de nutrición durante el primer año. Recién después de los doce meses se convierte en complemento de los alimentos. Además, al aportarle sustancias de defensa llamadas inmunoglobulinas, la leche materna continúa complementando y ayudando al sistema inmune mientras el niño la siga tomando.

  • Respuesta 6: FALSO. El cuerpo de la mujer produce leche según la demanda, cuanto más vacío este el pecho, más rápido trabajará para volver a llenarlo. Mientras que cuanto más lleno esté el pecho, más lenta será la producción de leche.

  • Respuesta 7: FALSO. Ya que el cuerpo produce leche según los estímulos que recibe para ello, si la mujer siempre espera a que se le "llenen" los pechos antes de amamantar, su cuerpo puede recibir el mensaje de que está produciendo demasiada leche y entonces, reducir la producción.

  • Respuesta 8: FALSO. La producción de leche por parte de la madre y su capacidad de almacenamiento (que a su vez está relacionado con el tamaño del pecho), así como las necesidades de crecimiento del niño, son los factores que determinan la frecuencia de las tomas del niño. El hecho de que existan días en que se producen picos de crecimiento y además las enfermedades que pudiera presentar el niño, también pueden cambiar temporalmente los patrones alimenticios del bebé. Por eso no es bueno imponer límites a la frecuencia o duración de las tomas o mamadas, ya que puede traer como consecuencia un consumo demasiado bajo de calorías.

  • Respuesta 9: VERDADERO. Los niños en general dan señales cuando tienen hambre. Sin embargo es posible que los recién nacidos no se despierten tan a menudo como lo necesitan, por lo que hay que despertarlos si fuera necesario para que coman por lo menos ocho veces cada 24 horas.

  • Respuesta 10: FALSO. El alimento más natural, sano e inofensivo que el niño puede ingerir es la leche materna. Si el bebé muestra señales de sensibilidad relacionadas con la alimentación, en general puede deberse o a enfermedades metabólicas muy raras o a alguna proteína extraña que hubiera ingerido la madre y logrado entrar a la leche materna, y no a la leche materna en sí. Esto último se evita fácilmente eliminando el alimento alergénico de la dieta durante un tiempo.

  • Respuesta 11: VERDADERO. Es muy importante que el niño se prenda por el tiempo suficiente (por lo menos diez minutos) a un mismo pecho ya que al principio la leche que baja tiene menor cantidad de grasas y por ende menos calorías que la llamada “segunda leche”. Si se le cambia de lado antes de tiempo, se llenará de la leche primera, más baja en calorías, en vez de obtener el equilibrio natural entre la primera y segunda leche. Esto podría producir que el niño no aumente de peso adecuadamente al no consumir la cantidad adecuada de calorías.

  • Respuesta 12: FALSO. Los niños nacen con capacidad para ingerir la cantidad adecuada de leche que requieren según sus necesidades. Esta capaciad de autoregular sus patrones alimenticios se manifiesta a través del amamantamiento. Es la alimentación con biberón y la introducción precoz de otros alimentos la causa de mayor riesgo de obesidad al crecer, no la lactancia natural.

  • Respuesta 13: FALSO. La cantidad de leche que una madre produce llega a su punto óptimo cuando se le permite al niño sano amamantar a demanda, es decir tantas veces como lo necesite. Cuando el niño es muy pequeño esto puede suceder a intervalos de tiempo menores que tres horas, ya que la capacidad gátrica del bebé recién nacido es muy pequeña.

  • Respuesta 14: VERDADERO. Colocar al bebé de esta forma favorece que la boca del niño rodee perfectamente al pezón, mientras que si el niño es posicionado con el vientre hacia arriba y debe prenderse al pecho girando la cabeza de costado, puede quedar un espacio entre la boca y el pecho por el cual entre aire, lo que puede producirle malestares o cólicos.

  • Respuesta 15: VERDADERO. El amamantamiento es uno de los momentos biológicos en los que más energía se necesita. Si restringimos la cantidad de calorías consumidas puede afectar adversamente la producción de leche.
    Copyright Bibliomed

¿Puedo darle una dieta vegetariana a mi hijo?

Desde hace algunos años, las dietas vegetarianas se convirtieron en una moda por sus ventajas para la salud: los vegetales no tienen colesterol, poseen vitaminas y minerales, y se digieren rápido. Pero también entrañan alguna desventaja: no aportan todos los nutrientes necesarios para el organismo. Y, en el caso de los niños, cuyo requerimiento nutricional es más alto que el de los adultos, una dieta vegetariana puede acarrear riesgos para la salud.
Las dietas vegetarianas están contraindicadas para los niños y los adolescentes, porque éstos se encuentran en plena etapa de crecimiento y los vegetales no brindan todos los nutrientes necesarios.
Estas dietas, si no están adecuadamente planificadas por un profesional idóneo, pueden producir desnutrición, por no cubrir los requerimientos de proteínas. Además de que, en niños y adolescentes, puede causar un déficit en el crecimiento. Otra consecuencia es la anemia por carencia de hierro (ferropénica), anemia ferropénica. Sus síntomas son el cansancio, la fatiga y, en los chicos, poco rendimiento en el colegio, y problemas de conducta. La falta de ácido fólico, que participa en la maduración de los glóbulos rojos, puede producir un tipo de anemia denominada megaloblástica. También, el déficit de calcio puede afectar la densidad de los huesos, y causar osteoporosis y osteomalacia.
Proteínas: los ladrillos del organismo
Con respecto al aporte de proteínas, la carne es una de las fuentes más completas. Y las proteínas son esenciales para el funcionamiento del organismo, pues participan en el crecimiento, el mantenimiento de las células, y en la contracción muscular.
Las proteínas se componen de unidades menores, los aminoácidos que, en distintas combinaciones, pueden constituir un gran número de proteínas diferentes. Algunos seres vivos producen todos los aminoácidos que necesitan para fabricar sus proteínas. Pero los seres humanos no podemos, por eso debemos ingerirlos en la alimentación.
El hierro es necesario para la producción de la hemoglobina, una proteína que se encuentra en los glóbulos rojos, y cuya función es transportar el oxígeno desde los pulmones hasta todas las células del cuerpo. Si falta el hierro, disminuye la hemoglobina y, en consecuencia, llega menos oxígeno a las células. Esto les produce un deterioro que, en algunos casos, puede dejar secuelas. Algunos estudios han demostrado que una anemia prolongada puede afectar el rendimiento intelectual en los chicos. Una etapa particularmente vulnerable al déficit de hierro es la pubertad, por el crecimiento rápido que tiene el organismo.
En los alimentos, el hierro se presenta bajo dos formas: uno que se denomina hem, presente en los productos de origen animal, y otro denominado no hem, que se encuentra en los vegetales. El hierro de origen animal se absorbe mucho mejor que el de origen vegetal. La absorción del hierro de los vegetales depende de la presencia de otros alimentos, como las fibras, ciertos metales, u otros componentes de la dieta. El hierro de la carne, en cambio, se ve poco modificado por esos factores.
Las vitaminas
Una vitamina importante para el organismo es la B12, que se encuentra en el hígado, en la carne vacuna, el pescado, los huevos, los mariscos y la leche. El déficit de esta vitamina puede provocar distintos tipos de anemia y trastornos en la absorción intestinal.
Otro componente importante para el organismo es el ácido fólico, que se encuentra en el hígado, los huevos, las levaduras, las verduras de color verde oscuro y con hojas, los porotos, y también en las nueces y las avellanas. La carencia de acido fólico, además de producir un tipo de anemia (megaloblástica), en embarazadas puede afectar el desarrollo del sistema nervioso del embrión.
Con respecto al calcio, para cubrir los requerimientos es necesario ingerir cantidades suficientes de vegetales verde oscuro, como la acelga, el berro, la achicoria y el perejil. El mejor recurso es la leche se soja fortificada o el queso de soja (tofú).
La vitamina D no existe en ningún alimento de origen vegetal, pero se puede obtener con suplementos, o con una adecuada exposición solar. Esta vitamina es fundamental para la absorción del calcio.
Lo importante, si se sigue una dieta vegetariana, es contar con el asesoramiento de un médico o un nutricionista.
Copyright Bibliomed

viernes, 14 de diciembre de 2007

Anemia en el embarazo

Causas
Con el embarazo aparecen una serie de cambios en el metabolismo de la mujer que implican un aumento de las necesidades nutricionales para abastecer satisfactoriamente las demandas del nuevo ser que comienza a gestarse en su vientre.
El nuevo territorio sanguíneo provocado por la placenta ocasiona un aumento progresivo del volumen de sangre circulante a expensas del plasma. Este aumento comienza alrededor de la décima semana de gestación y se extiende hasta las 30 a 34 semanas, para posteriormente estabilizarse hasta el parto. Esto va a originar una dilución de la sangre en sus componentes, lo que conllevará a una elevación de los glóbulos rojos, pero igualmente no alcanzará a compensar el aumento del plasma. Para que dicha elevación se lleve a cabo es imprescindible que el organismo disponga de una cantidad adecuada de hierro para formar la hemoglobina, principal componente de los glóbulos rojos, encargada del transporte del oxígeno hacia los distintos órganos.
Con los alimentos normalmente se ingieren de 12 a 15 mg. por día de hierro, el cual es transformado en el estómago para finalmente absorberse a nivel intestinal sólo de 0,5 a 1,5 mg. En la mujer embarazada, dicha absorción se encuentra elevada, alcanzando cifras entre 1,5 y 2,6 mg. Cuando el estado nutricional de estas mujeres es saludable, sus depósitos de hierro son suficientes para satisfacer el aumento del volumen sanguíneo circulante. Pero en otras, es necesario la administración de suplementos de hierro y de ácido fólico ya que no cuentan con las cantidades suficientes para afrontar este nuevo estado.


Influencias en el embarazo
La repercusión sobre el embarazo va a depender del tipo y el grado de anemia. Un embarazo de alto riesgo es aquel en el cual las cantidades de hemoglobina y de glóbulos rojos se encuentran por debajo de los valores considerados como normales ya que favorecerán el desarrollo de un sufrimiento fetal al no proporcionarle los niveles de oxígeno adecuados para su normal desarrollo.
Es común que se observe un retardo en el crecimiento de los recién nacidos, así como también una mayor probabilidad de parto prematuro.
También se ha visto una mayor incidencia de preeclampsia y de infecciones urinarias y aumenta considerablemente el riesgo de padecer una infección luego del parto.
Las anemias severas influyen en forma desfavorable sobre las afecciones cardíacas y pulmonares que presentaba previamente la madre, lo cual a su vez repercute en forma negativa en la gestación.


¿Cómo prevenirla?
Las manifestaciones clínicas que pueden presentarse en caso de anemia son la pérdida del apetito, cansancio, mareos, zumbidos en los oídos, sensación de falta de aire, piel y mucosas pálidas, aumento de la frecuencia cardíaca, hinchazón de pies y manos, entre otras. Estos síntomas son muy importantes a tener en cuenta, ya que constituyen un signo de alarma ante
un posible cuadro de anemia para así alertar a su médico. El se encargará de establecer las causas de dichos síntomas y de esta manera prevenir futuras complicaciones, tanto para la madre como para el bebe.
La mayoría de los casos de anemia durante el embarazo se deben a deficiencias de hierro, la cual habitualmente responde a una alimentación inadecuada, hecho muy común en las adolescentes.
La administración de suplementos de hierro asociada a un complejo vitamínico durante la gestación es recomendable en la mayoría de las embarazadas. De esta forma se previene la disminución de los depósitos de hierro y se asegura una cantidad suficiente para la producción de una mayor cantidad de glóbulos rojos.
En algunos casos la administración de ácido fólico es recomendada, ya que se prevendría la aparición de otro tipo de anemia a causa de una disminución de dicho complemento.


¿Qué es la amniocentesis?

En qué consiste
La amniocentesis es un procedimiento que se utiliza para obtener una muestra del líquido amniótico que rodea al feto, con el objeto de realizar exámenes en búsqueda de posibles situaciones peligrosas. Para obtener la muestra, se inserta una aguja muy fina a través del abdomen hasta llegar al útero, para lo cual debe determinarse exactamente la posición del feto y de la placenta a fin de no dañarlos. Esa determinación se realiza generalmente por la técnica del ultrasonido.
Puede realizarse en las etapas finales del embarazo para determinar la anemia fetal, la intolerancia al Rh, y para determinar si los pulmones del feto están lo suficientemente maduros como para que nazca. Pero desde hace un tiempo, la amniocentesis comenzó a usarse durante el segundo trimestre de la gestación para indagar sobre la posibilidad de ciertos defectos genéticos o cromosómicos como el Síndrome de Down, o de ciertas malformaciones.
La exactitud de la amniocentesis en el diagnóstico de anomalías cromosómicas está entre el 99 y el 100%. Pero no es un test que se indique a todas las mujeres embarazadas, ya que presenta un pequeño riesgo de infección o de aborto espontáneo. Según un estudio de los Centros para la Prevención y el Control de Enfermedades de los EUA (CDC), puede producir un aborto espontáneo por cada 400/200 embarazos.
Es cada vez más común que se practique entre 15 y 18 semanas después de la última menstruación. La amniocentesis temprana, entre las semanas 11 y 14 después del último período menstrual, no es recomendada a menudo por suponerse más peligrosa que la anterior.
La importancia de obtener una muestra del líquido amniótico es que en él existen células vivas del feto. Al hacer crecer durante una/dos semanas estas células en laboratorio pueden descubrirse anomalías cromosómicas y algunos defectos genéticos. El líquido también contiene alfafetoproteína (AFP), cuyo nivel medido en el laboratorio puede indicar el riesgo de ciertas alteraciones.
Luego de realizada la toma de la muestra, se recomienda que la embarazada descanse durante varias horas y que evite los esfuerzos físicos como permanecer de pie mucho tiempo, levantar o acarrear objetos pesados, etc.


Usos e indicación
Puede sugerirse su realización para la detección de trastornos cromosómicos cuando la mujer tiene 35 años de edad o más en el momento del parto, edad en que aumenta el riesgo de engendrar hijos con alteraciones cromosómicas. En el caso del Síndrome de Down, en el cual existe un cromosoma más que en los casos normales, las probabilidades aumentan cuatro veces luego de los 35 años, y varias veces más luego de los 40.
En el caso de un embarazo o un niño anterior con una anomalía cromosómica, o un antecedente familiar, suele ofrecerse la realización de la amniocentesis. También cuando existen antecedentes familiares de niños con defectos del tubo neural (médula espinal y cerebro, espina bífida y anacefalia). La amniocentesis puede diagnosticarlos midiendo el nivel de una sustancia producida por el feto (AFP) en el líquido amniótico. También puede hacerse cuando los estudios de AFP en la sangre de la madre hablen de un riesgo de que el niño pueda presentar esas alteraciones.
Mediante la amniocentesis también es posible diagnosticar infecciones uterinas y puede determinar la gravedad de una anemia fetal en casos de intolerancia al Rh para decidir sobre la necesidad de transfusiones de sangre para mantenerlo con vida.
Ya que la mayoría de las anomalías de nacimiento diagnosticadas por la amniocentesis no son tratables, muchos han criticado duramente la realización de este test prenatal, por considerarlo motivador de la realización de abortos.


Alcohol y embarazo

Introducción
Todo lo que una embarazada coma y beba afecta a su bebé. Si bebe alcohol, esto puede dañar el crecimiento de su bebé, pudiendo desarollar problemas emocionales y físicos que quizás lo acompañen por el resto de su vida. Los niños que nacen con problemas muy serios causados por el alcohol tienen síndrome fetal alcohólico (SFA), el cual puede causar una inmensa cantidad de serias consecuencias.
Ellos estarán en riesgo de:
· Nacer más pequeños. · Tener problemas al comer o al dormir. · Tener problemas para oír o ver. · Tener problemas al seguir instrucciones y al aprender a hacer cosas simples. · Tener problemas al prestar atención y al aprender en la escuela. · Necesitar maestras y escuelas especiales. · Tener problemas al relacionarse con otras personas y en controlar su comportamiento.
El SFA es fácilmente prevenible. Sólo hay que evitar la ingesta de bebidas alcohólicas durante el embarazo.

Preguntas y respuestas
Presentamos aquí algunas preguntas frecuentes con las respuestas que guiarán a la mujer a evitar la ingestión de bebidas alcohólicas durante el embarazo.
1. ¿Puede una embarazada beber alcohol?No. No beba alcohol cuando usted esté embarazada, ya que cuando usted bebe alcohol también lo hace su bebé, al igual que todo lo que ingiere.
2. ¿Hay alguna bebida alcohólica que pueda beber sin peligro durante el embarazo?No. El beber cualquier tipo de alcohol cuando esté embarazada puede lastimar a su bebé. Las bebidas alcohólicas son la cerveza, vino, refrescos a base de vino, licores o bebidas mezcladas. Un vaso de vino, una lata de cerveza, y una bebida mezclada tienen más o menos la misma cantidad de alcohol.
3. ¿Por qué si yo bebí durante mi último embarazo mi bebé nació bien? Cada embarazo es diferente. El beber alcohol puede lastimar a un bebé más que a otro. Usted podría tener un niño que nace saludable y otro que nace con problemas.
4. ¿Pueden desaparecer estos problemas? No. Estos problemas estarán presentes durante toda la vida del niño. Las personas con problemas muy severos quizás no puedan cuidarse solas o trabajar cuando sean adultas.
5. ¿Qué pasa si estoy embarazada y he estado bebiendo?Si usted ha bebido alcohol antes de saber que estaba embarazada, deje de beber ahora mismo. Usted se sentirá mejor y su bebé tendrá una mejor oportunidad de nacer saludable. Si usted planea quedar embarazada, no beba alcohol. Usted puede que no sepa que está embarazada inmediatamente. El alcohol puede lastimar el bebé aún cuando usted tenga solamente 1 ó 2 meses de embarazo.
6. ¿Cómo puedo dejar de beber?Hay muchas maneras de ayudarse a dejar de beber. Usted no tiene que beber cuando otras personas beben. Si alguien le ofrece una bebida, está bien decir que no. Aléjese de personas o lugares que le hagan beber. No mantenga alcohol en su casa. Si usted no puede dejar de beber, pida ayuda. Hay programas que le pueden ayudar a dejar de beber, y su doctor o enfermera pueden darle información. Aunque usted haya participado en uno de estos tratamientos anteriormente, inténtelo otra vez.

Síndrome fetal alcohólico (SFA)
Síndrome fetal alcohólico (SFA, o FAS por sus siglas en inglés) es el nombre dado a un grupo de defectos congénitos físicos y mentales causados por una mujer que toma mucho alcohol durante su embarazo.
Se caracteriza por un retraso en el crecimiento, anormalidades faciales, y un mal funcionamiento del sistema nervioso central. Los niños con SFA pueden tener problemas de aprendizaje, de memoria, dificultad para poner atención, resolver problemas, para hablar y escuchar. También pueden tener problemas en la escuela y para tener amigos.
El SFA es una condición irreversible que dura toda la vida y que afecta todos los aspectos de la vida del niño y de los miembros de su familia. Sin embargo, es totalmente evitable si la mujer no consume alcohol durante su embarazo.
Si una mujer embarazada toma bebidas alcohólicas pero su hijo no tiene todos los síntomas del SFA, es posible que haya nacido con una discapacidad en el desarrollo neurológico asociada con el alcohol (ARND por sus siglas en inglés).
No hay una cantidad de alcohol segura que las mujeres puedan tomar durante su embarazo. Cuando una mujer toma alcohol, también lo hace su feto porque el alcohol atraviesa libremente la placenta. No hay una dosis segura de alcohol durante el embarazo, y aparentemente tampoco existe un periodo seguro durante el embarazo para consumir alcohol.
Todas las bebidas con alcohol pueden lastimar al bebé. Una lata de cerveza contiene la misma cantidad de alcohol que una copa de vino o un trago de licor. Algunas bebidas alcohólicas, como las hechas a base de malta, los wine coolers, y las bebidas mezcladas muchas veces tienen una cantidad mayor de alcohol que una lata de cerveza.
Si una mujer embarazada toma bebidas alcohólicas, nunca es muy tarde para dejar de hacerlo. Entre más pronto lo haga, será mejor para ella y para su bebé.
No hay cura para este síndrome, pero si se identifica y diagnostica pronto, los niños con SFA pueden recibir los servicios adecuados para maximizar su potencial.
Información obtenida del Centro Nacional de Salud Ambiental, CDC.

Retardo del crecimiento en el embarazo

Definición
Un niño presenta un retardo en el crecimiento dentro del seno materno cuando puede estimarse que posee un peso muy inferior al que le corresponde al período gestacional en el que se encuentra la madre. En caso de nacer en el momento en que se detecta el retraso en el crecimiento, su peso se encontraría muy por debajo de los estándares obtenidos de niños considerados "sanos", cuyas madres no padecieron ninguna enfermedad conocida.
Diversos son los factores que pueden actuar modificando el crecimiento normal en el vientre de la madre; de hecho, en el 60% de los casos se los puede identificar. Entre los más frecuentes se destacan:
a) factores de riesgo presentes antes de la concepción, como el bajo nivel socioeconómico, primer hijo, edades limítrofes (adolescencia, edad avanzada), enfermedades como hipertensión arterial y diabetes;
b) factores de riesgo en el momento del embarazo, como embarazo múltiple, hipertensión inducida por el embarazo, período entre dos gestaciones menor a un año, aumento de peso al final del embarazo inferior a lo esperado, infecciones bacterianas, virales y parasitarias;
c) factores relacionados con los hábitos maternos, como tabaquismo, consumo de excesivo de cafeína o alcohol y estrés, entre otras.
Los niños considerados pequeños para su edad gestacional presentan un riesgo de mortalidad perinatal ocho veces superior que aquellos que presentaron un peso al nacer dentro de los límites normales.

¿Cómo detectarlo?
Desafortunadamente, en muchos casos el primer contacto que se tiene con la mujer es cuando ya está embarazada, por lo que en ese momento y en los subsiguientes controles prenatales deben identificarse aquellos factores de riesgo enunciados anteriormente, capaces de influenciar en el crecimiento del bebe dentro el útero. Con ésto se intentará detectarlos cuanto antes y poder corregirlos.
Generalmente, el retardo en el crecimiento es detectado recién entre las semanas 30 y 32, manifestándose con movimientos fetales escasos, disminución o cese del crecimiento del tamaño del vientre materno y poco aumento de peso de la madre.
La ecografía constituye el método diagnóstico de mayor sensibilidad para la detección de este trastorno.
En todos los casos debe conocerse fehacientemente la semana de gestación en la que se encuentra la madre, para no cometer el error de diagnosticar un retardo del crecimiento cuando en realidad es un niño con un crecimiento normal y en lo que se está equivocado es en la edad gestacional.

¿Cómo prevenirlo?
Antes y durante el embarazo pueden adoptarse una serie de medidas generales tendientes a evitar su aparición, como abandonar el cigarrillo, mejorar la alimentación para poseer un estado nutricional lo más adecuado posible y evitar las situaciones de estrés.
En caso de anemia o hipertensión inducida por el embarazo deben ser corregidas y fundamentalmente prevenidas con los controles prenatales que sean necesarios.
El reposo, principalmente acostadas de costado mejora la circulación a nivel del útero y la placenta.
Cuando el trastorno es detectado en las fechas próximas al parto, la decisión de continuar con el embarazo o inducir el parto depende de los recursos con los que se cuenten para asegurar la salud del hijo.

jueves, 13 de diciembre de 2007

Consejos de Terapia Ocupacional para mejorar la conducta

Todos conocemos niños desobedientes, inquietos o malos estudiantes. Y no es que sean así porque quieran. En muchos casos no son responsables de su actitud, porque hay algo más fuerte que ellos que determina su comportamiento. Ese algo puede ser un trastorno del procesamiento sensorial (TPS), también conocido como disfunción de la integración sensorial (DIS).El TPS o DIS se presenta cuando el sistema nervioso central no es capaz de interpretar y organizar adecuadamente las informaciones captadas por los diversos órganos sensoriales. Por tanto, tampoco puede analizar y utilizar dicha información adecuadamente para entrar en contacto con el ambiente y responder eficazmente a los múltiples estímulos del entorno.
Un trastorno en el procesamiento sensorial afecta profundamente a la capacidad de afrontar las ocupaciones de la vida cotidiana. Sencillas actividades como comer, vestirse, bañarse, jugar o hacer las tareas del colegio se convierten en inconvenientes difíciles de superar. Como consecuencia de un TPS pueden aparecer problemas emocionales, sociales y académicos, que en muchas ocasiones son achacados a otros motivos.
La Dra. Jean Ayres, terapeuta ocupacional estadounidense, fue la primera en describir un conjunto de conductas atípicas relacionadas con un procesamiento sensorial deficiente. Sus investigaciones la llevaron a formular la Teoría de la Integración Sensorial. Hoy día sabemos que los principios de esta Teoría son útiles no sólo para los niños que padecen TPS, sino para todos. Tener en cuenta los estímulos sensoriales que reciben los niños y los jóvenes, padezcan TPS o no, les puede ayudar a ser más eficaces en el desempeño de sus ocupaciones diarias y en su interacción con el entorno.
Los siguientes consejos para ayudar a los niños y jóvenes en su vida diaria están basados fundamentalmente en la Teoría de integración sensorial.
Adolescentes sanos
Actividades como patinar, andar en monopatín o hacer acrobacias en bicicleta suelen gustar mucho a los adolescentes. Y son una excelente manera de obtener grandes cantidades de estímulo vestibular, esencial para muchos adolescentes de cara a sentirse tranquilos y serenos. Sin embargo, la falta de espacios adecuados para desarrollar estas actividades las convierte en un estorbo para quienes no las practican.
Diversas investigaciones apuntan a la necesidad de que los adolescentes realicen actividades físicas variadas. Ante el alcohol, el tabaco y drogas en general, los jóvenes que practican actividades físicas tienen menos probabilidades de sucumbir que los adolescentes que pasan la mayoría de su tiempo en ocupaciones como ver la televisión, jugar a la videoconsola o escuchar música, según atestiguan numerosos estudios. Los jóvenes más activos también corren menos riesgo de verse implicados en violencia callejera, actividad sexual prematura o delincuencia.
Implicar a los jóvenes en sanas y productivas ocupaciones es esencial para favorecer una adecuada participación social.


  • Los jóvenes y el estudio
    A la hora de estudiar, los jóvenes deben encontrarse en un estado adecuado, es decir, relajados y descansados. Para que la mente esté activa y atenta, el cuerpo no debe hallarse cansado ni tenso.
    Se ha comparado nuestro estado de alerta y atención con el motor de un coche, el cual puede tener un nivel de revoluciones demasiado alto o demasiado bajo. Del mismo modo, nosotros podemos estar demasiado excitados o demasiado relajados; ambos estados nos impedirán concentrarnos y aprender adecuadamente.
    Si antes de estudiar se ve mucho la televisión o se juega en el ordenador o en la videoconsola, la mente estará demasiado excitada. Al contrario, la mente estará demasiado relajada, por ejemplo, si el estudio se realiza nada más despertar o a altas horas de la noche.
    Hacer yoga, practicar deporte, dar un buen paseo al aire libre o realizar otras actividades similares antes de ponerse a estudiar, ayuda al organismo a encontrar el estado de equilibrio apropiado para la concentración y el aprendizaje.

  • El niño y la rutina
    Para que los niños puedan regular su conducta es importante que sus actividades diarias estén organizadas de un modo equilibrado y previsible. A todos los niños les resulta tranquilizante saber lo que va a ocurrir a continuación.
    Del mismo modo que el suspense y lo desconocido excitan, las vidas desordenadas, con muchos cambios imprevisibles, producen inseguridad o excitación que se traduce frecuentemente en conductas negativas.
    Como es normal, todas las familias tienen momentos en los cuales hay que romper la rutina. En dichos momentos, debemos intentar mantener cuantos más elementos de la rutina sea posible. Por ejemplo, si se va a dormir fuera conviene llevar el muñeco, el libro de cuentos u otros elementos que suelen formar parte de la rutina de acostarse.
    Grandes cambios, como mudarse de casa, por ejemplo, pueden ser especialmente difíciles para los niños. Prepararlos, explicándoles claramente lo que va a pasar, les ayuda a sentirse más tranquilos. Hacer un dibujo o un juego con los acontecimientos especiales que se aproximan ayuda a que los niños estén más preparados para afrontarlos.

  • El autocontrol en los niños
    Habitualmente los problemas de comportamiento y atención en los niños son abordados con fármacos o con programas conductuales basados en premios y castigos.
    Ambas estrategias suelen dar buenos resultados, aunque con el inconveniente de que representan un control externo sobre el niño y pueden crear dependencia. Es decir, el niño funciona bien con la pastilla o con el premio correspondiente; pero si le faltan, su actitud empeora.
    Para evitar dicha dependencia, en coordinación con el médico o el psicólogo, el terapeuta ocupacional especializado en integración sensorial trabaja con el niño el aprendizaje de la autorregulación. Tras una evaluación específica del niño, se diseña un programa de actividades individualizadas, acorde con sus características sensori-motoras.
    Es imprescindible que padres y educadores sepan reconocer los estados de alerta inadecuados. Por ejemplo, un exceso de actividad o estar irritable son síntomas de un nivel de alerta inapropiado.
    Si se sabe cómo lograr que un niño se autorregule mediante una actividad ocupacional, se evitarán muchos problemas.

  • El niño y los actos sociales
    Para que la presencia de niños en actos sociales donde se requiere tranquilidad y silencio no acabe en riñas, castigos y disgustos, la Terapia Ocupacional nos brinda algunas estrategias.
    A muchos niños les resulta difícil permanecer sentados y tranquilos, por ejemplo, durante una ceremonia de boda o en una comida en un restaurante. Como es normal, se mueven, tocan todo lo que está a su alcance y buscan maneras de estimular su sistema nervioso.
    Para tratar de evitar esas conductas, debemos procurar que anteriormente obtengan la dosis sensorial que necesitan. Por ejemplo, actividades como saltar a la comba, jugar intensamente en los juegos del parque o jugar al balón proporcionan sanos estímulos vestibulares y propioceptivos que ayudan a regular el estado de alerta y tener más tranquilidad.
    Debemos evitar que vean televisión, que jueguen a la videoconsola o que realicen otros juegos sedentarios justo antes de un acto social formal. Si previamente han tenido bastantes estímulos sensoriales, proporcionarles después algunos juguetes pequeños será suficiente para que se entretengan y no molesten a los demás.

  • El niño en el supermercado
    Para prevenir caprichos y berrinches por parte de los niños mientras se hace la compra, la Terapia Ocupacional nos ofrece varias estrategias.
    Hay que implicar a los niños en la ocupación, lo cual hará que se sientan importantes, no se aburran y, por tanto, no empiecen con perretas para reclamar la atención. Por ejemplo, podemos preparar en casa la lista de la compra con ellos, aprovechando el momento para practicar la escritura y, a la vez, introducirlos en el arte de gestionar un hogar.
    Una vez en el supermercado, el niño puede levantar bolsas de patatas y paquetes de leche para meterlos en el carro o llevar alguna bolsa con los artículos comprados. También puede ayudar a meter la compra en el coche o llevarla hasta casa, guardarla en los armarios, etc.

  • Viajar en coche con niños
    Tener un desplazamiento tranquilo en el coche con dos o tres niños en el asiento trasero es algo que parece a veces imposible. El no poder moverse del sitio y las escasas posibilidades de cambiar de postura causan que muchos niños se vuelvan más irritables en el automóvil. En ese estado es más probable que estallen riñas y conflictos entre los ocupantes del asiento trasero.
    Por ello, hay que procurar que los niños tengan ocasión de moverse bastante y de tener actividades físicas suficientes antes de efectuar un viaje, porque es algo que les ayuda mucho a estar más tranquilos.
    Separar a los niños con unos almohadones o varios muñecos de peluche es una buena manera de evitar los pequeños roces que pueden transformarse rápidamente en grandes riñas.
    Poder escuchar música por unos cascos o ver una película en un reproductor de DVD es otro modo de mantener la atención de los niños alejada de las peleas. Si no, siempre es posible recurrir a algo más tradicional como es animarlos a cantar algunas de sus canciones favoritas.

  • El niño hipersensible
    El niño etiquetado como arisco es, a veces, un niño hipersensible táctilmente, al que la típica carantoña que los mayores suelen hacer en la cabeza le supone una verdadera molestia. Dada su percepción sensorial, afectada por un trastorno del procesamiento sensorial, es como si a nosotros se nos acercara alguien y nos proporcionara una dolorosa colleja.
    Padecer hipersensibilidad táctil también puede provocar que el niño rechace que le laven el pelo, la cara o los dientes. Asimismo, rechazar vestirse y tener dificultades con el sueño y la aceptación de alimentos son también problemas frecuentes en este tipo de niño.
    Debemos entender que hay una razón neurológica detrás de dichas conductas negativas y, por tanto, debemos tratar de adaptar las actividades diarias para que sean más llevaderas para el niño.

  • El niño y el sueño
    Los niños, para dormirse tranquilos, en los momentos previos tienen que evitar ciertos estímulos excitantes, como son ver la televisión y jugar a la videoconsola o al ordenador. Actividades como saltar o correr también deben evitarse a medida que se aproxima la hora de irse a la cama.
    Estas actividades físicas, sin embargo, deben formar parte de la rutina diaria del niño en otras horas, puesto que ayudan a regular el estado de alerta y facilitan que, más tarde, la transición entre la vigilia y el sueño se realice adecuadamente.
    Pero justo antes de dormir conviene realizar actividades que proporcionen estímulos relajantes. Por ejemplo, mecer a los niños, bien arropados y calentitos, ayuda a que se relajen antes de ir a la cama. Es preferible que el niño no se duerma mientras lo están meciendo, para que aprenda a dormirse solo en su propia cama.
    Una vez acostados, a algunos niños les viene bien que la ropa de la cama esté bien ceñida sobre ellos. Este estímulo de tacto profundo resulta muy eficaz para relajar; es comparable al efecto de un masaje relajante.

  • Niños que no comen bien
    Existen numerosas causas y de muy variados tipos por las que los niños no comen bien.
    A veces se trata de niños hipersensibles, es decir, con una excesiva sensibilidad oral, a los que les producen una sensación muy desagradable tanto las texturas como los sabores de los alimentos. Por esta causa, estos niños tendrán tendencia a los alimentos crujientes y secos o a los purés y líquidos muy finos. Hay otros niños cuya causa para no comer bien es el hastío que tienen de tomar siempre purés y papillas, cuando ya podrían estar con alimentos de texturas más duras. España es uno de los países donde los niños empiezan más tarde a comer texturas masticables. Igual que cualquier adulto se cansaría de comer siempre casi lo mismo, los niños también se hartan de tomar durante meses y meses comidas muy parecidas.
    En ambos casos, tanto en el de los niños hipersensibles como en el de los que están cansados ya de purés y papillas, puede resultar beneficioso incorporar a sus comidas alimentos crujientes, siempre teniendo en cuenta la capacidad de masticación del niño. Se les puede dar, por ejemplo, biscotes, ya que se deshacen fácilmente con la saliva en la boca, pero ofrecen una textura crujiente que suele gustar a casi todos los niños. Alternar una cucharada de verdura o fruta con un trocito de biscote también puede ser un buen truco.

  • Autonomía infantil en el cuarto de baño
    Las dificultades de muchos niños con el aprendizaje del uso de la bacinilla y el inodoro pueden ser debidas a un problema en el procesamiento sensorial.
    Es posible que un niño que no acaba de adquirir el control de sus esfínteres sea hiposensible a los estímulos y no sienta la necesidad de evacuar; o que la sienta in extremis, cuando ya no queda tiempo para acudir al cuarto de baño. Puede incluso no darse cuenta de que se ha manchado.
    Otros niños pueden ser hipersensibles y rechazar el contacto de su piel con la fría porcelana del inodoro. Algunos experimentan desagradables sensaciones en el momento de evacuar y optan por retener heces y orina para evitarlo. Esta conducta puede provocar infecciones y estreñimiento.
    En ambos casos, los juegos y las actividades que proporcionan estímulo propioceptivo, es decir, las que requieren fuerza muscular, ayudan a normalizar el procesamiento sensorial. Una intervención de Terapia Ocupacional basada en la Teoría de la Integración Sensorial también puede ayudar a que el niño responda de manera más adecuada a sus señales corporales.


Isabelle Beaudry Bellefeuille.Terapeuta Ocupacional. Presidenta de la Asociación Española de Integración Sensorial.



Juguetes apropiados de acuerdo a la edad de su niño

La siguiente es una lista de juguetes que la Academia Americana de Pediatría y otros estamentos recomiendan para los niños a edades específicas. Utilice estas recomendaciones al ir a comprar juguetes. Tenga en cuenta que estas son solamente recomendaciones. Todos los juguetes pueden ser peligrosos si no se usan apropiadamente o si no están en buenas condiciones. Los padres deberán comprobar que los juguetes estén etiquetados correctamente y siempre deberán supervisar a los niños pequeños.


  • Bebés recién nacidos a 1 año de edad

Seleccione juguetes de colores brillantes, de peso ligero, que le sean atractivos a la visión, el tacto y el oído de su bebé.

  • Libros de tela, plástico o cartón con dibujos grandes
  • Bloques grandes de madera o plástico
  • Ollas y sartenes
  • Sonajeros o maracas
  • Animales, muñecas o pelotas suaves y lavables

  • Objetos brillantes, móviles que estén fuera del alcance del bebé
  • Tableros de jugar para bebés
  • Juguetes flotantes para la bañera
  • Juguetes oprimibles

  • Niños que están aprendiendo a andar, de 1 a 2 años de edad
Los juguetes para estos niños deben ser seguros y poder resistir la naturaleza curiosa de estos niños.

  • Libros de tela, plástico o cartón con dibujos grandes
  • Muñecos sólidos y resistentes
  • Coches de juguete
  • Trompos musicales
  • Bloques de formas geométricas para empalmar o apilar
  • Juguetes de empujar y tirar (sin hilos largos)
  • Juguetes apilables
  • Teléfonos de juguete (sin cordones)

  • Niños de edad preescolar, de 2 a 5 años de edad
Los juguetes para este tipo de niños pueden ser creativos o pueden imitar las actividades de los padres y los niños mayores.
  • Libros (historias cortas o historias de acción)
  • Pizarras y tizas
  • Bloques de armar
  • Lápices de colores, pinturas no tóxicas para los dedos, barro, plastilina, etc.
  • Martillos y mesas de trabajo
  • Juguetes de limpieza para la casa
  • Juguetes para el exterior: cubos areneros (con tapa), resbaladillas o toboganes, columpios, casas de juego, etc.
  • Juguetes de transporte (triciclos, coches, vagonetas)
  • Reproductores de música (tocacintas o cassetes, tocadiscos, discos compactos)
  • Rompecabezas simples con piezas grandes
  • Ropa para disfrazarse
  • Utensilios para jugar al té

  • Niños de 5 a 9 años de edad
Los juguetes para este tipo de niños deberán ayudar a que desarrollen nuevas aptitudes y creatividad.
  • Tijeras sin filo, juegos de costura
  • Juegos de cartas
  • Juegos de médicos y enfermeros
  • Títeres
  • Pelotas
  • Bicicletas (con casco)
  • Juguetes para manualidades
  • Trenes eléctricos
  • Muñecas de papel
  • Cuerdas de saltar
  • Patines con equipo de protección
  • Equipo deportivo
  • Juegos de mesa

  • Niños de 10 a 14 años de edad
Las actividades de pasatiempo y las actividades científicas son ideales para esta edad.
  • Juegos de ordenador
  • Equipos de costura, tejido, trabajo de punto
  • Microscopios, telescopios
  • Juegos de mesa y juegos de tablero
  • Equipo deportivo
  • Colecciones y pasatiempos
De los aspecto comentados podemos concluir que la selección de un juguete apropiado puede ser laboriosa y algunas veces compleja y, por tanto, no puede hacerse a la ligera. De ahí que todos los que estamos al cuidado de los niños, incluidos los pediatras, debamos contribuir a educar y ayudar en este cometido. Porque a través del juego se pueden enseñar otras muchas cosas, como el espíritu solidario, el compañerismo, el compartir, el amor a la naturaleza, etc. Teniendo en cuenta estas consideraciones seguramente acertaremos en la compra del juguete apropiado, sobre todo en estas fechas que se aproximan tan propicias para regalar juguetes, que por cierto no tienen por qué ser los más caros ni los más sofisticados.

Control de esfínteres en los niños

La vejiga urinaria es un órgano que sirve para almacenar la orina que llega desde los riñones. Durante el llenado, la vejiga permanece relajada. Para evitar que se escape la orina, la vejiga y uretra cuentan con unos esfínteres, pequeños músculos que se sitúan a la salida de la vejiga y alrededor de la uretra, los cuales permanecen contraídos (cerrados). Cuando la vejiga se llena de orina el niño siente grandes deseos de orinar. En ese momento, desde la vejiga se envían señales a través de vías nerviosas que alcanzan la médula espinal y el cerebro. Una vez conocida la información, desde el cerebro se envían órdenes a través de vías nerviosas para que el esfínter se relaje (se abra) al tiempo que la vejiga se contrae para vaciar totalmente el contenido de orina.
Esta coordinación de funciones entre la vejiga y los esfínteres se lleva a cabo mediante mecanismos neurológicos de gran complejidad, por lo que su control voluntario aparece tardíamente.
Algo similar ocurre para el control de las heces en el tubo digestivo (región recto-anal), existiendo unos esfínteres (interno y externo) en el canal anal que al permanecer contraídos (cerrados) evitan que se escapen las heces cuando éstas llegan al recto.
La secuencia de adquisición del control vesical e intestinal en la mayoría de los niños es como sigue: primero se produce el control de las heces durante la noche y después el control de las heces durante el día. Posteriormente, se produce el control de la orina durante el día y finalmente el control de la orina durante la noche. Sin embargo, existe una variación interindividual e intercultural de este esquema. Para la adquisición del control diurno influyen poderosamente los factores educacionales, familiares, sociales, psicológicos y hereditarios.
Durante la lactancia la micción y la defecación se realizan de manera automática y refleja, es decir sin control voluntario.
Entre los 18 meses y los 3 años se produce la maduración de los centros nerviosos cerebrales, de manera que entre los 2 y los 4 años la mayoría de los niños pueden controlar adecuadamente ambos esfínteres (vesical y anal) y por tanto pueden comenzar a “avisar” su deseo, siendo capaces de retrasar el momento de la micción o defecación y de hacerlo en el momento y lugar deseado. Pero esta “habilidad" debe ser aprendida por el niño.

La mejor manera de fomentar el control de esfínteres es a través del estímulo y la gratificación. A partir de los 18 meses se debe sentar al niño en un orinal o bacinica a la misma hora todos los días durante unos minutos. Con el tiempo ocurrirá la defecación o la micción espontánea. Este momento debe ser festejado con cariño, aprobación e incluso con regalos para que el niño aprecie la alegría que este comportamiento suscita en sus padres. Poco a poco dicho evento se repetirá y se transformará en rutina.

La continencia urinaria nocturna es más difícil de conseguir y sólo se presenta en un 26 % de los niños a los 18 meses de vida. A los 3 años, el 75 % de los varones y el 80 % de las niñas permanecen secos durante la noche. A los 6 años tan solo un 13 % de los niños mojan la cama (enuresis nocturna). Cuando ocurre esto se debe consultar con el pediatra. Éste aconsejará e informará a los padres de la naturaleza del problema y descartará la existencia de otras patologías urológicas que cursan con incontinencia.

Cuando a un niño con más de 4 años se le escapan las heces sin que existan problemas en el recto o en el esfínter anal se denomina encopresis y ocurre entre el 1% y el 2% de los niños con 7 años. En la mayoría de los casos se produce secundariamente a un estreñimiento. La encopresis puede originar graves problemas sociales, familiares y psicológicos, y por tanto debe ser consultada asimismo con el pediatra o especialista.

¿Qué es lo que los padres no deben hacer ante una incontinencia urinaria o de las heces?
Enfadarse, regañarle y ridiculizarle delante de los demás. Esto agravará el problema.
No darle ninguna importancia o darle mucha más de la que tiene.
No exigirle al niño ni compararle con otros. Esto sólo generará angustia.

¿Qué se debe hacer?
Lograr la colaboración del niño.
Pedirle que ayude a cambiar la ropa de la cama o cambiarse él.
Tratar el problema con naturalidad, dándole la importancia que tiene, ni más ni menos.
Premiarle con cosas que le gusten los días que no se haga pis o se le escapen las heces.
Si con estos consejos no mejora la situación, deberá acudir a su pediatra o especialista para solucionar la incontinencia y evitar problemas de autoestima.



Dr. Carlos Gutiérrez Segura. Cirujano Pediátrico.Unidad de Urodinámica y Motilidad Digestiva Pediátrica, Hospital Central de Asturias.Unidad de Incontinencia Urinaria, Reeducación del Suelo Pélvico y Urodinámica, Centro Médico de Asturias.






martes, 11 de diciembre de 2007

Científicos alemanes vinculan la hiperactividad infantil a los genes

Un grupo de científicos alemanes indicó el jueves haber hallado pruebas de que la hiperactividad infantil está relacionada con los genes, al identificar tres mutaciones genéticas entre los niños afectados.El equipo de investigación dirigido por el profesor Johannes Hebebrand, de la Universidad de Duisburg-Essen (oeste alemán), analizó 329 familias con niños afectados por el trastorno de déficit de atención con hiperactividad (TDAH).Los expertos detectaron que la mayoría de ellos, alrededor de un 70%, presentaba una combinación de tres mutaciones en el gen llamado "transportador de dopamina", asociado a la hiperactividad.Los niños que "presentan esta combinación en ambas copias del gen tienen un riesgo 2,5 veces superior de sufrir TDAH. La gente con una sola copia de esta variante también tiene casi el doble de posibilidades" de contraerlo, señaló Hebebrand en un comunicado."Evidentemente, esto no significa que todo el mundo que tiene estas variantes genéticas padecerá automáticamente este trastorno", agrega.El estudio aporta pruebas más firmes sobre el papel del transportador de la dopamina en el desarrollo del TDAH, señaló este experto.Este trastorno psiquiátrico es el más común entre niños y adolescentes, sobre todo entre varones, cuyos índices son entre tres y cuatro veces superiores que entre las niñas.Fuente: AFP

Niños autistas podrían aprender a través de estereotipos, según estudio

Los niños autistas tienen una capacidad para entender a otras personas a través de estereotipos por lo que esa habilidad podría utilizarse para mejorar su aprendizaje y socialización, según un estudio hecho público hoy en el Reino Unido."Uno de los principales problemas de los niños autistas es que son incapaces de entender por qué el resto de gente hace determinadas cosas: cuáles son sus motivaciones o qué están pensando o sintiendo", explicó la catedrática Uta Frith, del University College London (UCL), que ha desarrollado la investigación."Este estudio demuestra que los niños autistas pueden comprender muy bien los estereotipos. Esperamos que esa habilidad pueda utilizarse para ayudarles en su aprendizaje y socialización", añadió.Los científicos de la UCL llevaron a cabo el estudio con cuarenta y nueve niños en edad escolar, veintiuno autistas y otros veintiocho sin ese problema, a los que les plantearon preguntas basadas en dibujos que representaban a hombres y mujeres coloreados en marrón o rosa.

El 75 por ciento de las respuestas dadas por los niños, tanto si eran autistas como si no, estaban basadas a estereotipos comúnmente mantenidos de raza o género.Por ejemplo, los investigadores mostraron a los menores un dibujo con dos niños, David y Emma, y les preguntaron cual de ellos tenía cuatro muñecas: la respuesta referida a David resultó negativa.La científica reconoció que los estereotipos "pueden ser peligrosos ya que son la base del prejuicio", pero recordó que todos generalizamos en algún momento en situaciones en las que tenemos que tomar decisiones rápidas y no sabemos nada sobre la otra persona.Los expertos, cuyo estudio será publicado en la revista "Current Biology", destacan que el autismo afecta a unas 500.000 familias en el Reino Unido Fuente: EFE

Medicamentos contra resfríos no tienen resultados en menores de 6 años

Un grupo de asesores de la Administración de Alimentos y Fármacos de EE.UU. (FDA) recomendó hoy no aplicar medicinas contra la tos y el resfrío común a niños menores de seis años.Los expertos indicaron que se deben realizar mayores estudios sobre los verdaderos efectos de esos medicamentos que se venden sin receta y se administran a los niños desde hace años en este país."Los estudios que disponemos ahora no demuestran su eficacia y parecen no tener resultados", dijo en un comunicado Sean Hennessy, epidemiólogo de la Universidad de Pensilvania, y miembro del panel de asesores.La recomendación se aplica a medicinas que contienen ingredientes como descongestionantes y antihistamínicos, pero no a los expectorantes, señaló.Fuentes de la FDA indicaron que se trata sólo de una recomendación que no tiene aplicación obligatoria aun cuando podría significar que en el futuro las etiquetas en los frascos que contienen esas medicinas lleven una advertencia sobre su uso.La recomendación fue dada a conocer después de que un grupo de pediatras pidió que la FDA limite la venta de esas medicinas a niños menores de seis años.Señalaron que estaban alarmados por un creciente número de casos de muertes, ataques y alucinaciones en algunos niños a quienes se habían administrado remedios contra el resfrío común.Sin embargo, las empresas farmacéuticas fabricantes de los medicamentos han afirmado que éstos son seguros y efectivos cuando se les administran en las dosis indicadas a niños de dos años o mayores.El director de la Oficina de Medicinas Nuevas de la FDA, John Jenkins, dijo que los miembros del panel reconocieron que los casos de efectos secundarios graves eran "muy raros" y pudieron haber ocurrido debido a sobredosis o mal uso de las medicinas."Debemos analizar de manera interna en la agencia la recomendación que hemos recibido", agregó.En una votación de 21 votos a favor y uno en contra el grupo recomendó que no se administren esas medicinas a niños menores de 2 años.Asimismo, por 13 votos a 9, sugirió que no se usen en niños de entre dos y seis años.Por otra parte, por 15 votos a 7, el panel se abstuvo de recomendar una medida similar en el caso de niños de entre 6 y 12 años Fuente: EFE

La lactancia mejora la inteligencia de niños con variante genética

Científicos de EE.UU. han confirmado que el amamantamiento mejora la inteligencia de un niño, pero sólo si éste tiene una determinada variante genética, reveló un estudio divulgado hoy por la revista Proceedings of the National Academy of Sciences."Esta variante genética es la FADS2, un gen que controla los ácidos grasos y que puede ayudar a los bebés a aprovechar mejor la leche materna y promover un desarrollo cerebral vinculado a un mayor coeficiente intelectual", dijo Julia Kim-Cohen, profesora de psicología de la Universidad de Yale.Los niños que no poseen esta variante genética tienen un desarrollo intelectual normal y para ellos "haber sido amamantados no les ayudó a contar con una ventaja intelectual", agregó.La investigación se centró en los ácidos grasos no saturados que están en la leche humana, pero no en la leche de vaca o en las fórmulas infantiles.Según los científicos, se cree que ese tipo de ácidos grasos aumenta el desarrollo intelectual debido a que cuentan con una enzima que ayuda a mejorar la neurotransmisión y el desarrollo neuronal.En el estudio participaron 1.037 niños en Nueva Zelanda y 1.116 familias con mellizos del mismo sexo en Inglaterra y Gales.Los niños que fueron amamantados y que contaban con la variante genética registraron un coeficiente intelectual entre 5,6 y 6,3 puntos más alto que otros niños que también fueron amamantados pero no tenían la variante.Los científicos señalaron en el informe sobre la investigación que ésta reveló que los genes no sólo están involucrados en las enfermedades.Esta variante genética también refuerza una reacción positiva a un acto (el amamantamiento) que está presente en toda la evolución humana, manifestaron.En el estudio también participaron científicos del King s College de Londres, de la Universidad de Duke, en Carolina del Sur, y de la Universidad de Otago, en Dunedin (Nueva Zelanda).Fuente: EFE

viernes, 7 de diciembre de 2007

Acido fólico contribuye a que bebés nazcan con más peso y sanos

Un 7 por ciento de todos los recién nacidos pesan menos de 2,4 kilos
La presencia de ácido fólico en la dieta de una mujer embarazada contribuye a que tenga bebés de mayor peso y más sanos, según un estudio de científicos de la Escuela de Ciencias Médicas de la Universidad de Newcastle (Reino Unido).Las dietas pobres en ácido fólico han sido relacionadas con un incremento del riesgo de defectos en los bebés, como la espina bífida.Según el estudio, este ácido, conocido también como la vitamina B9, tiene además otros beneficios.Los expertos estudiaron a 998 madres y sus recién nacidos en el hospital de Westcumberland, en la localidad de Whitehaven.Según los científicos, las embarazadas que fuman tienen normalmente menos ácido fólico en la sangre, lo que explicaría que suelan tener bebés de menor peso.Aproximadamente un 7 por ciento de todos los recién nacidos pesan menos de 2,4 kilos, por lo que tienen un 50 por ciento de posibilidades de sufrir alguna incapacitación.Los investigadores británicos, dirigidos por Caroline Relton, establecieron una estrecha relación entre el nivel de ácido fólico en la sangre y el peso de los bebés, que aumenta un 14 por ciento por cada unidad adicional de este ácido.

Algunos alimentos son ricos en ácido fólico, como las espinacas o el brécol, los cítricos, los productos a base de harina integral y los cereales con alto contenido de fibras.Según la directora del equipo investigador, es importante que las mujeres aumenten su ingesta de ácido fólico desde el primer momento de su embarazo. Fuente: EFE

Madurez de óvulos favorece el éxito en fertilización artificial

Según estudio, hay 48% más de probabilidad si el óvulo tiene 5 días en vez de 3
Cuanto más maduros son los óvulos mayor es la probabilidad de que salga adelante la fertilización artificial, según un estudio realizado por médicos belgas y publicado hoy en la revista "New England Journal of Medicine".Según los investigadores, una vez que el óvulo se implanta en la matriz, las posibilidades de que ocurra el nacimiento son el 48 por ciento superiores si ese óvulo tiene cinco días en vez de tres.Por otra parte, el estudio determinó que el 32 por ciento de 175 mujeres que recibieron óvulos fertilizados más maduros dieron a luz en comparación con el 22 por ciento de 176 que recibieron óvulos más "frescos".Los resultados del estudio se dieron a conocer en momentos en que los médicos han intensificado sus investigaciones para conseguir la concepción de bebés de probeta con la implantación de un solo embrión.Aunque el uso de varios embriones mejora las posibilidades de éxito, también aumenta el riesgo de nacimientos múltiples con bebés que corren mayor peligro de tener problemas en su desarrollo.

En el 2002 en Estados Unidos el 35 por ciento de los partos en los que se utilizó esta tecnología tuvieron como resultado el nacimiento de mellizos, trillizos o más.En una nota publicada en la revista, Laura Schieve, epidemióloga de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de EEUU (CDC), señaló que la investigación es "alentadora".No obstante, advirtió de que debido a que el estudio se realizó con mujeres menores de 36 años, su resultado se aplica a menos de la mitad de las que reciben tratamiento contra la infertilidad en Estados Unidos Fuente: EFE